¿La inteligencia artificial se va a quedar con mi trabajo?

Una nota para no entrar en pánico y hacer una jugada profesional más inteligente.

El mundo del trabajo siempre es vulnerable a los cambios científicos, tecnológicos y económicos del mundo. Hoy la crisis y las inteligencias artificiales (IA) aparecen en nuestros trabajos: aplicaciones que diseñan, escriben, traducen o programan en cuestión de segundos. Pero con las AI aparecen también las ansiedades: ¡Es imposible competir contra eso! ¿Debería abandonar todo, irme a la montaña y hacer una huerta?

Hola, mi nombre es Anggie, soy licenciada en Informática, desarrolladora de software y docente, especializada en el diseño y desarrollo de aplicaciones e infraestructuras tecnológicas escalables y de alta concurrencia. Si a vos también te preocupa el futuro de tu trabajo, es válido pero el problema no es la inteligencia artificial en sí y en este blog voy a explicarte por qué.

Para poner en discusión el desarrollo tecnológico y su vínculo con los derechos humanos, primero necesitamos aclarar algunas ideas que circulan sobre las Inteligencias Artificiales (IAs), las empresas y trabajadores del sector de tecnología.

“Están despidiendo a cientos de personas para reemplazarlas con IAs."

El 2023 arrancó con despidos masivos (layoffs) en empresas como Google, Amazon y otras corporaciones tecnológicas. Para el primer semestre ya habían superado los despidos del 2022, así lo reportó la pagina layoffs.fyi quienes monitorean este fenómeno y arroja varios datos interesantes.

 

Un total de 872 compañías de tecnología, despidieron a 219.882 personas en el 2023. Si comparamos con el año anterior, son 186 compañías menos, pero 55.173 personas más.  META es una de las empresas con más despidos en el 2022 y en el 2023.

Pero estos despidos masivos no tienen un motivo único y no están necesariamente relacionados con la incorporación de IAs, de hecho para el desarrollo y entrenamiento de las inteligencias artificiales hubo más contrataciones y se crearon puestos nuevos.

 

Lo que sí afectó es la recesión que trajo la pandemia, que en su momento aceleró el crecimiento de plataformas como Zoom, Netflix y Linkedin, que ahora no se sostienen y caen drásticamente. Además la guerra en Ucrania y la pérdida de popularidad del blockchain, hicieron que los grupos inversores frenen las inversiones en tecnología y sin inversores, no hay biyuya.

La digievolución del trabajo

Pero esta situación de inestabilidad e incertidumbre, igual nos afecta a quienes no somos propietaries de corporaciones y empresas millonarias de tecnología, ni formamos parte de sus equipos de trabajo. Vemos cómo los desarrollos avanzan con poca y nula regulación, como se viralizan herramientas y estudios que nos generan pánico.

Como el estudio viral de Open IA, Open Research y la Universidad de Pennsylvania; que enlista los trabajos que corren riesgo de desaparecer y los que no. Un artículo extremadamente polémico por su falta de rigurosidad científica y lo tendencioso de sus conclusiones, que funcionó mejor como publicidad de Chat GPT que para concientizar sobre la vulnerabilidad y precarización del mundo de los trabajos digitales.

Así como este artículo, muchas personas y empresas juegan a “predecir” los puestos de trabajo que van a desaparecer con la incorporación de la inteligencia artificial, y posicionar como “libres de riesgo” aquellos trabajos tradicionalmente precarizados como los que están vinculados a la producción y el servicio (agricultura, limpieza, cocina, etc).

 

Indudablemente la tecnología afecta el mundo del trabajo. Ahora, une puede sucumbir al pánico y tomar una postura anti tecnología, como también puede tratar de adaptarse a los cambios utilizando este tipo de herramientas para impulsar su propio beneficio. Lo cierto es que el cambio va a suceder y va a ser irremediable, tratar de frenarlo es casi como ir hacia la mitad del siglo XVIII y tratar de frenar la revolución industrial.

Entonces, ¿la inteligencia artificial va a reemplazarnos?

Dependerá de nuestra capacidad de adaptarnos.

Los cambios han sucedido siempre. Por ejemplo en su momento Blockbuster decidió quedarse en el camino sin innovar e internet lo atropelló. ¿Es culpa de internet?

Post pandemia ya pudimos ver los beneficios del Internet y cómo acelera las comunicaciones, las ventas online, los trámites. Internet no es una cosa buena o mala, es una herramienta y así como las inteligencias artificiales. Si Blockbuster hubiese decidido innovar, tal vez hoy serían nuestro Netflix, al fin y al cabo, eran quienes tenían todos los VHS para hacerlo.

Como sociedad iremos incorporando la tecnología para hacer tareas y procesos, posiblemente muchas mejorarán nuestra calidad de vida, así como la revolución industrial trajo la maquinaria que nos ahorró muertes por tracción a sangre. Incluso posiblemente en algún punto veamos más robots y es algo que no vamos a poder cambiar. Dónde sí necesitamos enfocarnos es en cómo implementamos estas tecnologías en términos de inclusión, privacidad, seguridad y compatibilidad con los derechos humanos.

La tecnología nunca es neutra en términos políticos.

Cuando apareció la imprenta, fue una solución tecnológica que popularizó el conocimiento, que también significó una ventaja privilegiada para quienes las tenían. Pero como respuesta, se consolidaron las bibliotecas públicas y posteriormente con la difusión vía internet (el amigo de Blockbuster) dónde hoy podemos elegir entre muchas tecnologías para comunicarnos, trabajar y socializar.

El rol de la ciencia y la tecnología nunca es neutro en términos políticos. Por eso debemos estar siempre alertas y celebrar cuando están al servicios de los derechos humanos.

Por eso es que el rol de la tecnología no es neutro. Cuando seleccionamos y desarrollamos tecnología, se juega la ética de forma implícita dónde decidimos también qué políticas de privacidad aceptamos, cuál es el manejo de nuestros datos, quien monopoliza esa información, y cuál es la información que esas organizaciones elegirán para alentar nuestro consumo.

Las decisiones tecnológicas y quienes invierten en su desarrollo tiene grandes repercusiones políticas sobre nuestra vida y nosotres mismes. Por eso debemos estar siempre alertas y celebrar cuando la ciencia y la tecnología están al servicios de los derechos humanos (¡como con las Madres de Plaza de Mayo!).

¡Gracias por leer hasta acá!
Espero haberte dado más claridad sobre este tema.
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¡Hasta la próxima!
Anggie

Te recomiendo esta nota de @idigital_ok que acabo de leer : ¿La inteligencia artificial se va a quedar con mi trabajo?

Anggie Manassero

Anggie Manassero

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